Detectan 2.000 bidones radiactivos en el Atlántico frente a Galicia


 Redacción Catomedia

Una expedición científica francesa ha identificado más de 2.000 bidones con desechos radiactivos a unos 600 kilómetros de la costa de Galicia, en el fondo del océano Atlántico. Los residuos fueron arrojados por varios países europeos entre 1940 y 1980, durante décadas en las que esta práctica era legal y común en Europa. La campaña de exploración, liderada por el Centro Nacional de Investigación Científica (CNRS) de Francia, busca mapear y estudiar los efectos de este vertedero submarino considerado uno de los mayores del mundo.

La misión, denominada Nodssum, zarpó el pasado 15 de junio desde el puerto de Brest a bordo del barco oceanográfico L’Atalante. En lo que va de la expedición, los científicos han cartografiado 120 kilómetros cuadrados —una pequeña fracción de los 10.000 kilómetros cuadrados estimados del área total del vertido— y han logrado detectar 2.000 barriles gracias al uso del robot submarino UlyX, equipado con sonar y sensores de radiación. Las muestras extraídas de sedimentos, agua y fauna marina están siendo analizadas en laboratorio para evaluar su impacto ambiental.

De acuerdo con el geólogo marino Javier Escartín, uno de los coordinadores de la misión, hasta ahora no se han registrado niveles alarmantes de radiactividad. Sin embargo, persiste la incertidumbre sobre el contenido exacto de los bidones. Se presume que contienen residuos de baja y media actividad relacionados con el desarrollo inicial de la energía nuclear, como materiales de laboratorio o equipamiento contaminado, depositados en contenedores de cemento.

La existencia de estos residuos no es desconocida para las autoridades europeas, pero nunca antes se había realizado un mapeo detallado con tecnología de última generación. La campaña cuenta con el apoyo de instituciones como el Instituto Francés de Investigación para la Explotación del Mar y la Agencia de Seguridad Nuclear y Radioprotección de Francia, en coordinación con el comité de radioactividad del Convenio OSPAR y la Comisión Europea.

El hallazgo ha reavivado la preocupación institucional en Galicia y en Bruselas. Eurodiputados del BNG y el PP han solicitado explicaciones formales a la Unión Europea, mientras que la Xunta ha pedido información al Gobierno español. El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha asegurado que los análisis realizados no muestran niveles significativos de radiación en las costas gallega y cantábrica, y ha reiterado que España no participó en esos vertidos ni tiene responsabilidad sobre su estado actual.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Trump visita prisión para migrantes rodeada de caimanes en Florida y genera controversia

Ecuador recibirá USD 1.000 millones en inversión extranjera para el sector energético tras gira presidencial

Ecuador fija matrícula de $10 para autos eléctricos como incentivo ambiental y económico